El conflicto se originó en el año 2013 con el despido de 44 trabajadores, entre ellos 2 delegados, sin causa ni información alguna. Al poco tiempo, los dueños dejaron de “aparecer” por la fábrica y los trabajadores no tuvieron otra opción que ocupar y resistir. El proceso de vaciamiento, se hizo en forma lenta y subrepticia con el correr del tiempo, hasta que finalmente el viernes 31 de agosto por la madrugada un grupo de mecánicos ingresó al taller y lo desmanteló. Habían pasado tan sólo unas horas desde que los trabajadores terminaban de imprimir el último encargo consistente en envases de medicamentos. De éste modo criminal, 60 familias ahora están en riesgo de quedar en la calle.
En el video realizado por los compañeros del Grupo de Video Antorcha pueden verse los testimonios de los trabajadores que resisten en dicho espacio. Los testimonios son variados en sus formas, pero en sus dichos hay un hilo en común: el del trabajo mancomunado. Los recuerdos de la inmensa cantidad de trabajos realizados e incluso de los destinos en el exterior, permiten comprender que la mercadería producida era adquirida en dólares, y que lejos de haber una problemática en torno a los ingresos el vaciamiento obedece a otras razones.
Son dichos testimonios los que confirman que la conflictividad gremial se generó al calor de los innumerables peros que ponía la empresa a la hora de cumplir con obligaciones tales como el pago del medio aguinaldo o simplemente de las horas extras, por no hablar de los vales de comida estipulados en el Convenio Colectivo de Trabajo. Así es que en su defensa, los trabajadores constituyeron una comisión interna la que peleó por éstas demandas incumplidas.
Frente a la constitución de la comisión interna la respuesta de la patronal fue el envío de 44 telegramas de despido lo que derivó en la toma del establecimiento por los trabajadores (situación que fue cubierta en su momento por Barricada TV https://youtu.be/ZtkR1K8ZWP8) quienes luego de un prolongado conflicto fueron reincorporados a instancias de la intervención del Ministerio de Trabajo. A partir de allí comienzan a sucederse una serie de hechos de amedrentamiento, discriminación, maniobras de vaciamiento que culminaron con el criminal acto de vaciamiento llevado adelante por los propios dueños e integrantes de la familia Cortiñas quienes fueron detectados trasladando el equipamiento al Parque Industrial Cañuelas, donde los trabajadores fueron a manifestar y hoy se encuentran acampando para vigilar la maquinaria.
Hoy los trabajadores se encuentran sin fuente de ingresos alguna, esperando la intervención de la justicia por lo cual hacen una llamado desesperado a aportar al fondo de huelga y a la solidaridad que puedan obtener del resto de los trabajadores.
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