jueves, 1 de octubre de 2015

BUSCANDO JUSTICIA PARA VENCER A LA IMPUNIDAD

Se cumplieron 6 meses del asesinato de Diego Aljanati a la salida de la matinée “Enjoy” en Ituzaingó y sus familiares y amigos se concentraron esta mañana en la puerta de la Fiscalía N°2 de la ciudad para reclamarle a la Fiscal Narmona Luppi que reactive la causa y condene a la policía que manejaba el patrullero que arrolló al chico de 13 años.
Pasadas las 10.30 los familiares cortaron la calle Brandsen al 3300 y se manifestaron pacíficamente frente al establecimiento judicial durante aproximadamente una hora. El papá y la mamá de Diego ingresaron a la Fiscalía solicitando hablar con Luppi, pero una vez más, adujeron desde allí que la señora no se encontraba. Cristian Aljanati, el padre de Diego describió así la situación judicial del asesinato: “La causa no avanzó nada. Con las pruebas que teníamos presentamos un petitorio para cambiar la carátula y que se amplíe la declaración y no nos contestaron. Recién ahora se están haciendo las últimas pericias mecánicas de la camioneta, después de 6 meses de estar bajo la lluvia. Es una risa”. Aquella noche Diego y sus amigos fueron perseguidos varias cuadras por los patovicas de la matinée que pertenece al “Club Leloir” (uno de los boliches más importantes de la zona oeste) por un altercado del que ellos ni siquiera formaron parte. Mientras los chicos escapaban se montó un operativo policial desmedido y un patrullero conducido por la oficial Graciela Basualdo aceleró por una calle de tierra y atropelló a Diego. “La carátula está como homicidio culposo y nosotros pedimos que se pase a homicidio agravado porque es un funcionario público, ni siquiera estamos diciendo que fue dolo, no sé qué están esperando”, expresó Cristian. Luego del asesinato, la Municipalidad de Ituzaingó sólo tomó como medida la clausura preventiva de la matinée (que luego abre a las 24 como boliche para mayores) por 6 meses. “La Municipalidad no hace nada, nadie se comunicó conmigo. Te pintan todas las calles de Ituzaingó y la Fiscalía, y hoy la mugre la esconden debajo de la alfombra”. Cristian, cabizbajo como buscándole la explicación a lo sucedido tras medio año, reflexionó sobre qué significa para el futuro esta ardua pero necesaria lucha: “Dieguito ya no siente nada. La lucha es para que sea un precedente y las cosas cambien de verdad. Justicia sería que no pase más”.

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